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VIDEO: Los dardos de Mourinho apuntaron contra todo y todos tras ganar la Premier

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El Chelsea consiguió este domingo ante la grada de Stamford Bridge la quinta liga de su historia, la tercera con Mourinho en su banquillo. Un título más para el extenso curriculum del técnico portugués, que repasó lo duro que fue conseguir esta Premier comparándola con lo fácil que lo tienen “otros”.

"Yo podría haber sido más inteligente y como otros haber elegido un equipo de un país donde es fácil ser campeón, donde pueden disfrutar con calma de su éxito. Pero yo he elegido un país en el que es difícil ganar y un club sin una gran tradición de ganar títulos de la Premier League ya que el último fue en 2010. Yo opto un trabajo difícil", dijo Mourinho en la sala de prensa. ¿A quién se refería el portugués? Es fácil pensar que a Guardiola, que la semana pasada consiguió en su segundo año en la Bundesliga su segundo título de liga con un Bayern cuya supremacía es total. 

Mourinho habló también de las amplias goleadas de otros equipos –el Barça ganó al Córdoba ayer 0-8, hace unas semanas el Madrid apabulló en el Bernabéu al Granada con un 9-1 y el Bayern ha endosado también severas derrotas a otros equipos alemanes durante esta campaña-. "No comparo este triunfo con otros logrados en el pasado. Pero debo decir que ganar aquí, en Inglaterra es muy difícil. La Premier está cambiando y todos se hacen más fuertes. Es imposible ganar a ningún equipo por marcadores como 8-0 o 6-0. El Crystal Palace, por ejemplo, vino aquí hoy con una actitud fantástica", comentó el luso después de la victoria de su equipo ante el Crystal Palace por 1-0.

"En otros países esto no es así. Pero aquí dieron una dimensión exacta a la Premier y a la naturaleza de la competición. El fútbol inglés sigue siendo mi favorito", volvió a decir.

El luso explicó, además, las claves de este nuevo éxito en el Chelsea. "Vine a trabajar lo mejor que podía y dar todo lo que podía para ser campeón. Esto ha sido consecuencia del trabajo y la dedicación. Cuando volví sabía que iba a volver a la liga más difícil de ganar en el mundo del fútbol. Y lo hemos hecho. Yo tenía mi familia justo detrás del banquillo y pude abrazarles y besarles. Dejé que los jugadores disfruten en el terreno de juego".