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Inglaterra e Italia dividen honores con empate 0-0

Partido válido a la UEFA Nations League

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En su primer cara a cara después de la final de la Eurocopa, Inglaterra e Italia empataron este sábado por la tercera jornada de la Liga de las Naciones de la UEFA. 

Si bien ambos equipos dispusieron de ocasiones claras para marcar, ninguno de ellos las aprovechó y su duelo estuvo condenado en no pocas fases por un ritmo de partido lento.

El aliciente de 'vengarse' por la derrota en la final de la Eurocopa marcaba una cita entre el líder y el colista del grupo A3 de este torneo. El choque se presentaba tan interesante por aquel duelo de Wembley como por la situación en la tabla.

El rumor de las gradas estuvo condicionado desde el principio porque los 'tres leones' aún tenían que satisfacer ante la UEFA el castigo que les impuso por el mal comportamiento de sus aficionados en los prolegómenos de la Euro. Por eso mismo, el Molineux Stadium, hogar de los Wolves, solo pudo acoger a 3.000 seguidores, casi todos niños, pues se permitía la entrada de un adulto por cada diez pequeños -menores de 14 años-.

Desafortunadamente para los jóvenes seguidores, las oportunidades para gritar de emoción por lo cerca que estaban los suyos de anotar un gol llegaron a cuentagotas. Aunque tanto unos como otros dispusieran de oportunidades claras para haber nutrido el marcador, nadie fue capaz de adornarlo siquiera con una sola diana.

Al partido lo condenaron muchas fases de poco ritmo. En su mayoría, eran momentos en que Inglaterra combinaba tranquilamente con la pelota a la espera de encontrar huecos en el esquema defensivo rival. Los italianos, semicómodos en este contexto, daban pasos adelante en cuanto podían y, en efecto, ponían en serios apuros a sus contrincantes.

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De ahí que Ramsdale se erigiera en una de las figuras del día. Sacó un disparo a bocajarro de Tonali en la primera mitad y elevó una mano providencial ante un chut potente de Pessina. Su homólogo Donnarumma también tuvo trabajo, pero no con esas cotas de tensión. Los errores de los delanteros de Southgate eran suficientes para que él no hubiera de intervenir.

De hecho, la probablemente mejor ocasión de los 'tres leones' nació de un pase de Reece James al segundo palo que Sterling, completamente solo, mandó a las nubes. La entrada de Harry Kane en la segunda mitad para tomar el testigo e intentar desbloquear la situación tampoco salió bien y los locales tuvieron que conformarse con unas tablas que no sirven de mucho.

Esto último es cierto tanto a nivel de sensaciones como desde un punto de vista práctico. En sensaciones, Inglaterra sigue de capa caída y no consigue resarcirse de su descafeinado arranque de temporada en la Liga de las Naciones. Tampoco se 'venga' por la Eurocopa. En el plano práctico, el equipo sigue colista de su grupo, el A4, si bien las distancias de puntos están muy apretadas.

La conclusión es la contraria en Italia, donde Mancini puede estar satisfecho con que los suyos no se dejaran llevar por la insistencia inglesa en dominar el duelo. La 'Azzurra' generó más peligro, fue fiel a su estilo y, aunque podría haber ganado, sumó a su casillero una unidad que vale de sobra para mantenerse en lo más alto de la clasificación.