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Bala Gómez y Mauricio Solís jugaron histórico partido del fútbol mexicano

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El viernes anterior se celebró el Día Internacional de la Mujer, y por eso quise compartir con el estimable lector de everardoherrera.com una historia más acerca del paso de los ‘legionarios’ ticos en el fútbol del extranjero, en este caso, relacionada con tan importante día en pro de los derechos del sexo femenino.

En 2002 el mundo futbolero experimentaba interesantes cambios con respecto a la participación de las mujeres en el deporte que más nos apasiona. Si bien desde una década antes algunos países ya habían empezado a concretar considerables esfuerzos al respecto (Costa Rica, por ejemplo, había visto los primeros acercamientos de Adriana Durán en el periodismo deportivo, mientras que Ave María Alpízar, Ericka Vargas y Claret Jiménez comenzaban a arbitrar encuentros varoniles), en el caso de México, la oportunidad de romper paradigmas aún no asomaba, en concordancia con el ideal azteca del macho charro y bebedor de tequila…

  

Sin embargo, la dirigencia arbitral de aquella nación, encabezada primero por don Arturo Yamazaki, y posteriormente por don Edgardo Codesal -ambos, mundialistas-, consideraron que el momento había llegado, y así depositaron toda su confianza en Virginia ‘Vicky’ Tovar, el entonces nuevo prospecto del referato femenil mexicano, a quien nombraron árbitra central del partido Irapuato-América, escenificado el domingo 22 de febrero de 2004 en el Estadio Sergio León Chávez, casa de los ‘freseros’ irapuatenses.

Por esas cosas del destino, resulta que justamente en aquel tiempo jugaban para el Irapuato los futbolistas costarricenses Mauricio Solís y Ronald ‘la Bala’ Gómez, ambos al servicio de un cuerpo técnico también tico comandado por Alexandre Borges Guimaraes, hoy recientemente nombrado estratega de LD Alajuelense. Así, los dos jugadores nacionales, mundialistas en Corea-Japón 2002, actuaron en un duelo que quedaría en los registros históricos del balompié azteca, al ser el primero de la máxima categoría mexicana dirigido por una mujer.

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Solís y Gómez se las vieron ante el club más mediático de aquel país, que contaba con importantes figuras como Cuauhtémoc Blanco, Guillermo ‘Memo’ Ochoa, Pavel Pardo, German Villa y el chileno Reinaldo Navia, y finalmente los nuestros consiguieron imponerse 2-1 en un disputado enfrentamiento en el que ‘Vicky’ Tovar debió expulsar a dos futbolistas -uno por bando-, el primero de ellos, Ronald ‘la Bala’ Gómez, por lo tanto al oriundo de Pilas de Canjel le correspondió convertirse en el primer jugador en recibir una tarjeta roja por una árbitra mujer en toda la historia del balompié de México.

Hoy ya han transcurrido dos décadas desde aquel juego, y la participación femenil en el fútbol azteca aún continúa tratando de abrirse campo, lo cual ha sido muy difícil puesto que muchos allá siguen considerando que es un medio exclusivamente de hombres… Sin embargo, sirva este espacio para concederle el valor a quienes se aventuraron a dar los primeros pasos por un cambio, y al mismo tiempo, para resaltar el hecho -si bien circunstancial- de que hubo participación de compatriotas ticos en el histórico partido celebrado hace veinte años en el Sergio León de Irapuato. ¡Pura vida!

* El autor es historiador de fútbol costarricense y responsable de la página de Facebook Gol de Camerino; pronto estará publicando el libro Nuestros primeros legionarios. Futbolistas ticos en el mundo 1875-1990. Especial agradecimiento al historiador mexicano don Sergio Eduardo Romo por la información y material aportados.

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